Leizarán, el muro de la vergüenza - Niko Gutiérrez

ETA ha logrado en más de una ocasión resquebrajar el muro democrático.  El cambio de trazado de la autovía de Leizaran fue uno de los casos más significativos de rendición del Estado de Derecho.

ETA logró después de tres asesinatos -casi 200 atentados contra constructoras y bancos-, y una inversión de 24.283 millones de pesetas (6.700 millones más de lo previsto), modificar el itinerario diseñado inicialmente.

La parte militar de la banda terrorista se encargó de los asesinatos; los Grupos “Y” de los atentados de “baja” intensidad, y Lurraldea, la plataforma encabezada por Jonan Fernández, de dotar a todo aquello de una determinada estética para conseguir una negociación con el Estado y demostrar que la vía de la violencia era útil para alcanzar objetivos políticos.

Quizá lo menos importante, por obvio, es que todo aquello era la estrategia de ETA o que Jonan Fernández fuera el elegido  para encabezar las listas de Herri Batasuna en Tolosa en las elecciones municipales de1987.

Lo más revelador es la falta de pulcritud democrática del Partido Socialista de Euskadi

Lo más revelador es la falta de pulcritud democrática del Partido Socialista de Euskadi, que gobierna actualmente en coalición con el PNV, y que no ha expresado, ni en público ni en privado, el más mínimo reparo a que este personaje no solo siga en el Gobierno Vasco, sino que vea recompensada su trayectoria, con el nombramiento como máximo responsable de la Secretaría de Paz y Convivencia de la Agencia Vasca para la Cooperación.

Desde esta Agencia, que cuenta con un presupuesto global para 2.017 de 43.044.551 €, Jonan Fernández ejecutará a su libre albedrío una política de reparto de fondos a diferentes organizaciones que atenderá a los siguientes criterios:

  • Orientar las actuaciones de cooperación para el desarrollo hacia un enfoque de reconocimiento de los derechos humanos y su efectivo cumplimiento.
  • Fortalecer los canales de exigibilidad de los derechos políticos, civiles, económicos, sociales, culturales y ambientales, para garantizar los procesos de desarrollo de los pueblos y garantizar las libertades básicas de mujeres y hombres.
  • Facilitar el respeto, garantía, defensa, promoción e implementación de los derechos humanos, así́ como la denuncia de los diferentes casos en los que se violan.

Que la ejecución de todos estos criterios recaiga en manos de una persona que ha dado buena muestra de generosidad hacia aquellos que han asesinado y perpetrado actos de violencia terrorista no puede pasar inadvertido para un partido democrático.

Hoy es el Partido Socialista de Euskadi el responsable de que este mamporrero y su obra hayan alcanzado la excelencia

Que el pragmatismo lleve al PNV a colocar en un área de gobierno a una especie de mamporrero para que medie con un sector al que considera formado por sus hijos descarriados no es noticia; pero que el Partido Socialista participe de un gobierno que incrementa el poder de una persona de moral distraída frente al gatillo, que en ningún momento ha expresado arrepentimiento, es verdaderamente vergonzoso.  Porque si bien fue Jonan Fernández el encargado de dar una estética al comportamiento de la banda terrorista ETA frente al Estado de Derecho, hoy es el Partido Socialista de Euskadi el responsable de que su obra haya alcanzado la excelencia, al permitir que este individuo sea la imagen fiel de la política de Derechos Humanos del Gobierno Vasco en el mundo.

 

1 Comentario

  1. Jonan Fernández, la primera vez que lo vi en las noticias me recordó a los muñecos «Madelman» de mi infancia, muñecos que deseaba pero que nunca me trajeron los Reyes Magos, quizá por que era el mayor de nueve hermanos y se pasaba del presupuesto familiar. Luego cuando lo escuché hablar y ver más fotos ví que era de la misma camada del cura Setién, escurridizo de sangre fria, con mirada de jugador de poker, que no muestra sentimiento alguno, alguien en quien no confiaría de conocerlo. Un personaje en la sombra y que vive del presupuesto urdiendo trampas y telones que esconden la verdad. Lamentable el papel del PSE de la última década, Patxi Lopez, Gema Zabaleta, Eguiguren, Pastor o Idoia Mendía y los que me dejo por haber dejado de seguir las noticias del PSE al perder todad esperanza.